Metapastiche

 

Thor Love and Thunder me ha sorprendido. Me dio pereza verla en su momento por su apariencia de pastiche pero finalmente le he entrado y es más que eso, es un metapastiche. Un pastiche que juega declaradamente con su condición para ir más allá del género que el propio UCM ha contribuido a consolidar, moviéndose entre extremos irreconciliables. Entre el arcoiris, el brilli brilli y el blanco y negro, entre la tragedia a golpe de cáncer terminal y la autoparodia, haciendo un sincretismo mitológico desverngozado, saturando la pantalla de cameos que rompen la 4ª pared, abusando de una referencia gastada como G´n´R y de la identidad de marca del Heavy Metal más ochentero. 

 

Y entonces, ¿adonde a parar Love and Thunder tras ir al borde del descarrile todo el rato all over the place, que dicen los gringos? Pues por el camino del cuento infantil, de vuelta al cómic puro y duro, como medio resuelto desde la escasez a base de solución ausente de todo prejuicio. No sé, es una peli rarísima, resultado por una parte de la falta de ideas genuinas pero, por otra, abordando este hándicap con audacia. 

 

A ver, tampoco es una peli de Leos Carax pero algo de eso tiene, aunque siga al de Surennes como desde la mesa de dibujo de Ditko bocetando a toda hostia cuatro paridas de Stan Lee para entrar en imprenta en dos horas, en vanguardia de su propia urgencia por ocultar su retraso, pero en vanguardia de alguna forma, super a la zaga. Y eso contra la tentación de asegurar el resultado por la senda de la reiteración ortodoxa, es algo.